ARMONIZACIÓN FACIAL
ARMONIZACIÓN FACIAL CON ÁCIDO HIALURÓNICO
Cada cara es distinta y, por tanto, cada paciente única/o. Gracias a los procedimientos estéticos de armonización facial con ácido hialurónico podemos mejorar la simetría del rostro, resaltamos tu belleza y unicidad.
Con nuestras técnicas avanzadas, como el relleno con ácido hialurónico o la toxina botulínica, entre otras, podemos lograr los mejores resultados potenciando tu belleza natural.
El ácido hialurónico es una sustancia natural que proviene de nuestro organismo. Es un componente estructural fundamental de la piel y está implicado en los procesos de síntesis de colágeno y elastina. Además, tiene funciones de retención de agua, aportando hidratación y volumen a la piel.
El paso del tiempo y los procesos de envejecimiento provocan una reducción cuantitativa de esta molécula, debida a una disminuida capacidad de renovación de la misma. Como resultado, el rostro pierde la grasa que le da volumen y la piel pierde elasticidad, además aparecen arrugas dando un aspecto “envejecido”.
En medicina estética, el relleno facial con ácido hialurónico resulta un excelente aliado para mejorar, sin cirugía, todas estas pérdidas.
Con nuestros tratamientos de armonización facial con ácido hialurónico, nuestros cirujanos plásticos conseguirán eliminar ojeras, perfilar labios, dar volumen, rejuvenecer la cara e incluso estimular la regeneración de piel, entre otros muchos beneficios.
Los pómulos son uno de los principales elementos estéticos del tercio medio facial, siendo estos durante la juventud voluminosos y definidos. El proceso de envejecimiento conlleva la falta de volumen de los mismos, tanto por la pérdida de los compartimentos grasos que dan soporte, así como por la flacidez de la piel y el tejido celular subcutáneo.
La reestructuración y voluminización de los pómulos con ácido hialurónico es uno de los elementos más importantes en la armonización facial del tercio medio. Como resultado, se consigue un aspecto más joven, armónico y secundariamente ayuda a corregir la presencia de ojera.
La búsqueda de un labio más perfilado y voluminoso convierte a este tratamiento en el más común de los realizados con ácido hialurónico. Su objetivo es ganar volumen en labios muy finos, perfilar la forma en labios que han perdido su contorno natural o simplemente para hidratarlos.
En base al efecto que se quiera lograr, el tratamiento se puede realizar con diferentes densidades de ácido hialurónico, dando como resultado unos labios más carnosos, definidos e hidratados.
Los surcos nasogenianos, al igual que las comisuras labiales o líneas de marioneta, son surcos naturales que se acentúan gradualmente por diversos factores. Entre ellos, la expresión continua facial, la pérdida de volumen de la grasa facial y el incremento de la flacidez de los tejidos, tanto superficiales como profundos.
Su corrección con ácido hialurónico tiene como objetivo restituir el volumen perdido en dichos surcos, corrigiéndolos visualmente y dando un aspecto más joven.
La línea y ángulo mandibular juegan un rol fundamental en la estética del tercio inferior facial. Su forma bien definida expresa en hombres un rostro masculino y fuerte, mientras que en mujeres un perfil redondeado y suave confiere un aspecto elegante y joven.
La definición de las líneas y ángulos se adapta a cada paciente, en base a su anatomía, sexo y características étnicas faciales. Este tratamiento es muy común que se combine con otros que armonicen el tercio medio y superior facial, consiguiendo así un tratamiento fullface.
El mentón es el elemento central en la simetría del tercio inferior. Su tamaño y proyección definen la longitud facial y la armonía de los tercios faciales, así como la estética general masculina y femenina.
La mentoplastia con ácido hialurónico es un tratamiento que sirve no sólo para armonizar la longitud del tercio inferior facial, sino también para corregir asimetrías leves o moderadas en mentones con retracción o poco proyectados.
Además, actualmente es una excelente herramienta para evitar en muchos casos una cirugía, pudiendo hacer el tratamiento en consulta, de manera inmediata y con el máximo confort. Es común que se convine con otros tratamientos voluminizantes, siendo un elemento clave en la armonización facial.
El tercio superior facial tiene elementos que con el envejecimiento pierden volumen y tienden dar un aspecto vacío (fosa temporal) o con leve caída (cola de la ceja).
La reposición de volúmenes perdidos con ácido hialurónico produce un efecto antiaging, así como la elevación de la posición de la cola de la ceja.
El envejecimiento del área peribucal ocurre de diversas maneras, las principales son la pérdida de volumen y perfil de los labios, pero también la aparición de finas y pequeñas líneas de expresión peribucales secundarias al movimiento del músculo orbicular de los labios, estas arrugas son llamadas comúnmente código de barras.
Su tratamiento consiste en la aplicación de ácido hialurónico de manera sutil, rellenando estas finas lineas de expresión, perfilando e hidratando al mismo tiempo, recuperando las lineas armónicas y anatómicas de los labios.
Los pómulos son uno de los principales elementos estéticos del tercio medio facial, siendo estos durante la juventud voluminosos y definidos. El proceso de envejecimiento conlleva la falta de volumen de los mismos, tanto por la pérdida de los compartimentos grasos que dan soporte, así como por la flacidez de la piel y el tejido celular subcutáneo.
La reestructuración y voluminización de los pómulos con ácido hialurónico es uno de los elementos más importantes en la armonización facial del tercio medio. Como resultado, se consigue un aspecto más joven, armónico y secundariamente ayuda a corregir la presencia de ojera.
La búsqueda de un labio más perfilado y voluminoso convierte a este tratamiento en el más común de los realizados con ácido hialurónico. Su objetivo es ganar volumen en labios muy finos, perfilar la forma en labios que han perdido su contorno natural o simplemente para hidratarlos.
En base al efecto que se quiera lograr, el tratamiento se puede realizar con diferentes densidades de ácido hialurónico, dando como resultado unos labios más carnosos, definidos e hidratados.
Los surcos nasogenianos, al igual que las comisuras labiales o líneas de marioneta, son surcos naturales que se acentúan gradualmente por diversos factores. Entre ellos, la expresión continua facial, la pérdida de volumen de la grasa facial y el incremento de la flacidez de los tejidos, tanto superficiales como profundos.
Su corrección con ácido hialurónico tiene como objetivo restituir el volumen perdido en dichos surcos, corrigiéndolos visualmente y dando un aspecto más joven.
La línea y ángulo mandibular juegan un rol fundamental en la estética del tercio inferior facial. Su forma bien definida expresa en hombres un rostro masculino y fuerte, mientras que en mujeres un perfil redondeado y suave confiere un aspecto elegante y joven.
La definición de las líneas y ángulos se adapta a cada paciente, en base a su anatomía, sexo y características étnicas faciales. Este tratamiento es muy común que se combine con otros que armonicen el tercio medio y superior facial, consiguiendo así un tratamiento fullface.
El mentón es el elemento central en la simetría del tercio inferior. Su tamaño y proyección definen la longitud facial y la armonía de los tercios faciales, así como la estética general masculina y femenina.
La mentoplastia con ácido hialurónico es un tratamiento que sirve no sólo para armonizar la longitud del tercio inferior facial, sino también para corregir asimetrías leves o moderadas en mentones con retracción o poco proyectados.
Además, actualmente es una excelente herramienta para evitar en muchos casos una cirugía, pudiendo hacer el tratamiento en consulta, de manera inmediata y con el máximo confort. Es común que se combine con otros tratamientos voluminizantes, siendo un elemento clave en la armonización facial.
El tercio superior facial tiene elementos que con el envejecimiento pierden volumen y tienden dar un aspecto vacío (fosa temporal) o con leve caída (cola de la ceja).
La reposición de volúmenes perdidos con ácido hialurónico produce un efecto antiaging, así como la elevación de la posición de la cola de la ceja.
El envejecimiento del área peribucal ocurre de diversas maneras, las principales son la pérdida de volumen y perfil de los labios, pero también la aparición de finas y pequeñas líneas de expresión peribucales secundarias al movimiento del músculo orbicular de los labios, estas arrugas son llamadas comúnmente código de barras.
Su tratamiento consiste en la aplicación de ácido hialurónico de manera sutil, rellenando estas finas lineas de expresión, perfilando e hidratando al mismo tiempo, recuperando las lineas armónicas y anatómicas de los labios.
PRECIO
PRECIO
DESDE 350€
DURACIÓN
DURACIÓN
20-40 MINUTOS
ANESTESIA
ANESTESIA
LOCAL
RESULTADOS
RESULTADOS
INMEDIATOS
PRECIO
DESDE 350€
DURACIÓN
20-40 MINUTOS
ANESTESIA
LOCAL
RESULTADOS
INMEDIATOS
ANTES Y DESPUÉS
La confianza de nuestros pacientes se extiende incluso después del tratamiento, cuando nos permiten compartir sus antes y después para que otras personas puedan ver nuestro trabajo. El único retoque de estas imágenes es el de la tinta de los tatuajes y los lunares de la piel, borrados para proteger la privacidad de nuestros pacientes.
Pómulo, línea y ángulo mandibular
Pómulo, línea y ángulo mandibular y mentón
Mentoplastia
Aumento de labios con hialurónico
Aumento de labios con hialurónico
Aumento de labios con hialurónico
PREGUNTAS FRECUENTES
Tras valorar el caso y aclarar posibles dudas del paciente, se procede a realizar el tratamiento que acostumbra a durar entre 20-40 minutos la sesión, dependiendo de las zonas tratadas.
Los resultados son inmediatos, aun así, el definitivo y óptimo se apreciará a las dos semanas. Se obtendrá una recuperación de volúmenes que dará equilibrio y armonía facial con una mayor definición del contorno facial y del perfil corrigiendo posibles asimetrías. Además, conseguimos retrasar los signos del envejecimiento, previniendo la flacidez y reduciendo las arrugas gracias a la redensificación de la piel.
La duración de los efectos oscila aproximadamente entre 6 y 18 meses. Esta dependerá del tipo de Hialurónico inyectado y de algunos factores externos como por ejemplo la práctica de deporte.
En el rostro se distinguen áreas dinámicas y áreas estáticas. Cuando reemplazamos volúmenes o realizamos correcciones, según el área tratada se utilizan ácidos hialurónicos más “compactos” y duraderos (como en pómulos, mentón, ángulo mandibular) o “menos densos” y de rápida absorción (como en labios y mejillas).
Se recomienda evitar tomar AINES (medicamentos anticoagulantes y antiinflamatorios) como ibuprofeno o aspirina, durante la semana previa a la realización del tratamiento. En caso de alergias, herpes activo u otras enfermedades el paciente deberá consultar con el médico si se puede realizar el tratamiento o es mejor aplazarlo.
En general es aconsejable programar una cita con tres semanas de antelación al evento. Si aparece un pequeño hematoma causado por la aguja habitualmente dura de tres a siete días.
Es recomendable no tocar ni manipular la zona tratada, así como evitar cualquier tipo de deporte durante las 72 horas después del procedimiento. También se aconseja evitar tratamientos dentales, protegerse de los rayos solares (FPS 50+) y de las temperaturas extremas (sauna, tratamientos termales o climas gélidos) durante las siguientes 48-72 horas. En caso de hematoma se deberá seguir usando protección solar.
El tratamiento de armonización facial con ácido hialurónico se puede combinar con Vitaminas, PRP y toxina botulínica (dependiendo de las zonas) entre otros tratamientos, sin ningún inconveniente. En caso de querer someterse a otros tratamientos, se recomienda consultarlo con el profesional.
La infiltración del producto se puede hacer con aguja o con cánula, bajo anestesia local o aplicando cremas anestésicas, haciendo que el procedimiento sea indoloro o ligeramente incómodo. Aun así, el ácido hialurónico contiene un anestésico que reduce las molestias post tratamiento.
Dependiendo de la técnica se puede aplicar anestesia local. Igualmente, el mismo producto que se infiltra está compuesto por una anestesia para hacer el procedimiento menos molesto.
Sí, puede aplicarse en cualquier época del año, siempre y cuando se sigan las recomendaciones del especialista.
No se han realizado estudios concluyentes en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia que indiquen que pueden someterse a dicho tratamiento. No obstante, nuestra recomendación, si es posible, es aplazarlo para otro momento.
